Nuevos tiempos para la sumillería

Haciendo un tirabuzón aprovecho que en mi Spotify suena Golpes Bajos con su “Malos tiempos para la Lírica” y arrancamos.

Lunes 16 de noviembre, comienza el 2º encuentro de Sumilleres Degusta la Rioja en Logroño, ciudad que vive el vino por los cuartos costaos y ¿que habrá de nuevo? ¿Será una feria más de vinos? Acudo con la intención de recobrar nuevas y buenas sensaciones en ésto de la sumillería que muchas veces se plaga de un elitismo que nada tienen que ver con el real ultramundo de los amantes del vino y su cultura del comunicar, compartir y disfrutar de un buen rato, o dos, con una copa, o tres.

En ésta ocasión el destino hace que me reúna con viejos a amigos y compañeros de otras batallas como Juan Ruiz (Sumiller de Aponiente ** Michelin), Guillermo Cruz (Sumiller de Mugaritz** Michelin), David Robledo (Sumiller de Santceloni ** Michelin). Tres perfiles muy diferentes con una común pasión por el vino. De entrada parece que no será una feria más y cada uno de ellos en sus ponencias abordan diferentes temáticas desde la experiencia, formación, visón de futuro y como no, con una gran humildad que les hace  merecedora del respeto como profesionales que se les supone y  que ratifico que tienen más que sobrada. Sería tan positivo para nuestro sector un poco más de escuchar y menos aparentar, mas compartir y menos  querer impresionar.

Entre ponencia y ponencia disfrutamos con un recorrido por grande añadas históricas dirigida por Carlos Echapresto con grandes vinos de Bodegas Riojanas, Viña Albina Gran Reserva 1942, Monte Real Gran Reserva 1955, Monte Real Gran Reserva 1964, Monte Real Gran Reserva 1970, Monte Real Gran Reserva 1986, demostrando todos ellos  una máxima en la vida para todo, que las cosas bien hechas duran más y mejor. Sospechosamente rebosantes de acidez transformada en vida, limpidez para su edad y restos de fruta licorosa tras sus delicadas y a veces tenues notas olfativas. Un placer siempre aprender de los mayores, deberíamos escuchar más a nuestros “viejos”, ya cometieron  nuestros mismos herrones décadas antes que nosotros y lo superaron.

Me llamó mucho la atención que los dos stands más visitados y casi venerados, fuesen de vinos generosos, sí………  esos de los que todos hablamos, vanagloriamos y tan poco consumimos” con invitaos de excepción, los Finos Palmas  de Gonzalez Byass, recién embotellados de la nueva saca de Otoño. Pero lo más sorprendente y gratificante era ver tanta gente joven, nueva savia para la cepa, que nivelazo, criterio y sedientos de ¡¡más vino por favor!! se ve que la WSET llega para quedarse y quien no se ponga las pilas está out. En palabras de nuestro gran y admirado  Custodio Lopez Zamarra, que nos confesaba con cierta nostalgia y envidia sana que ojala hubiera tenido los medios de los que hoy disponemos para compartir el conocimiento, y sin embargo allí estaba el, es un GRANDE.

Termina una jornada que comenzó a las 5 de la mañana en Sevilla con ilusiones y expectativas y que termina con una cena en petit comité con amigos y apasionados del vino en la que cada uno trae vino del que quizás no puedas comprar en muchos lugares, únicos, especiales y por eso los compartíos, porque para eso fueron creados. 

Daniel Ramos Dtor. Sumiller Ejecutivo Grupo Viñafiel